¿Cómo crear una cartera de inversión que asegure el capital invertido, una buena rentabilidad y un complemento a la pensión futura? Según los informes de la OCDE, nuestro país en 2050 será el segundo país más envejecido del mundo, sólo por detrás de Japón. A efectos de las futuras pensiones, esto significa que por cada jubilado habrá solo 1,5 personas en edad de trabajar, con la consiguiente presión en el sistema público de pensiones. Ante este panorama, hay dos alternativas. O los planes de pensiones o crear nuestra propia cartera de inversión. Nos fijamos en la segunda opción y valoramos cómo sacarle máxima rentabilidad, a través de inversiones inteligentes.

Este post es un extracto del Webinar que D. Vicente Riveira, Doctor Ingeniero Industrial y Profesor Emérito  UPM, y D. Carlos E. Gonzalez Guillén. Doctor en Matemáticas y Subdirector Dpto. Matemáticas Aplicadas ETSII UPM, impartieron el pasado 24 de febrero. Si no pudiste asistir o quieres profundizar más sobre el tema, te dejamos el enlace para ver la grabación en su totalidad.

La «regla del 72» aplicada a las carteras de inversión

Los mercados financieros no sólo son para profesionales, también los inversores individuales pueden crearse su propia cartera de inversión. Obtener rentabilidad de estas inversiones para complementar nuestras futuras pensiones es un ejercicio de conocimiento, asignación de recursos y otras variables. Tiempo y riesgo son dos de ellas y explicamos los motivos.

La idea es aportar una inversión inicial para sacarle una rentabilidad que complemente nuestra pensión en el momento de jubilarnos. Pero, ¿Cómo calcular la rentabilidad de nuestra inversión?   Si hiciéramos hoy mismo esta inversión, en 20/24 años multiplicaríamos por 4 el montante de la inversión inicial. En 10/12 años, multiplicaríamos por 2, mientras que en los mercados financieros  podríamos obtener rentabilidades de entre un 6% y 7,2%.  Es lo que en los mercados financieros se conoce como «regla del 72» con la que los inversores pueden estimar cuántos años son necesarios para que nuestra inversión se duplique.

Y la otra variable para conseguir las rentabilidades mencionadas, es el riesgo.  Hay un sesgo bastante tipificado en los inversores individuales sin mucho conocimiento en mercados financieros que merma las rentabilidades en las carteras de inversión. Es «el sesgo de la aversión a las pérdidas»  o «aversión miope del riesgo»,  que se resume a que el temor a perder algo es un incentivo mayor que la posibilidad de ganar algo con un valor igual o superior. Movernos en el estricto corto plazo o con miedo al riesgo provoca este efecto «miopía» y a tomar decisiones equivocadas. Por ese temor al riesgo, se invierte en productos que nunca van a proporcionar la rentabilidad que necesitamos para asegurar ese capital complementario a nuestras pensiones.

¿Cómo calcular el capital necesario para complementar las pensiones?

El envejecimiento de la población de nuestro país está provocando una tensión financiera en el sistema público de pensiones que, previsiblemente, irá a más cuando los llamados «baby-boomers» – los nacidos entre 1946 y 1964 – se jubilen.

Ya en 2019, en otro webinar sobre finanzas personales , impartido también por D. Vicente Riveira, hablábamos sobre cómo el aumento en la esperanza de vida de nuestro país tensionaría el sistema de pensiones. España en 2050 será uno de los más longevos del mundo. En 30 años habrá 76 ciudadanos españoles mayores de 65 años por cada 100 en edad de trabajar. Esto quiere decir que tendremos una tasa de sustitución altísima. 

Este indicador mide el porcentaje de ingresos en la pensión con respecto a los ingresos recibidos como trabajadores en activo. En España ronda el 83% y es una de las más altas de Europa. Como ejemplo, un trabajador en activo que cobrara 2.000€ y una pensión de 1.000€ en el momento de su jubilación, tendría una tasa de sustitución del 50%. 

Mantener una tasa de sustitución del 70% en salarios altos va a ser muy difícil en el futuro. Los salarios altos son los que más van a sufrir en cuanto a tasa de reposición. 

Por tanto, es necesario comenzar a preguntarse ¿Cuánto dinero es necesario para completar nuestras pensiones? Según los expertos, serían necesarios 10 veces nuestro salario para mantener nuestro nivel adquisitivo en el momento de nuestra jubilación. O dicho de otra manera, el para calcular el capital de inversión para complementar nuestras pensiones sería 10. 

Y de nuevo el factor tiempo.  La cantidad de dinero que debemos destinar para la inversión destinadas a reforzar nuestras jubilaciones, aumenta exponencialmente con la demora en el tiempo con que se haga. Aquí la máxima que impera es «cuánto antes, mejor». 

Fórmula del interés compuesto

Tradicionalmente se pensaba que el AHORRO era la solución para el aporte extra a nuestras pensiones, pero ahora ya no es suficiente. No es la solución al problema, sólo a una parte de ella.

Es necesario INVERTIR y, además, INVERTIR CON INTELIGENCIA . Hay que sacar un rendimiento inteligente a ese ahorro para conseguir el capital extra que necesitamos como aporte a nuestras jubilaciones. 

Cómo hacerlo y de qué manera para obtener estas rentabilidades, es lo que nos proporciona la Fórmula del Interés Compuesto. donde el tiempo es la variable más importante.  Hay una relación directa entre la tasa de rendimiento y el número de años. Cuántos más años se destine a la inversión, mejores rendimientos se obtendrá.  

Como conclusión, lo que determina la rentabilidad de una inversión es tener conocimiento suficiente, jugar con variables como el tiempo y asumir riesgos en la inversión.

Imagen de cabecera de Pixabay

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